14 nov, CI.- El Escuadrón Móvil Antidisturbios -Esmad- atacó violentamente una manifestación pacífica campesina en el corregimiento La Hermosura, vereda Puerto de los Cerros (municipio Bolívar, departamento Santander). La comunidad de encuentra desde hace 47 días en una protesta pacífica contra la empresa de transporte de hidrocarburos, oleoductos, polioductos y gasoductos Cenit, a causa de los múltiples incumplimientos de los acuerdos que esa entidad suscribió con las personas que habitan el territorio.
“Nosotros llevamos una manifestación pacífica que ya lleva 47 días. Eso se está haciendo porque Cenit tiene una planta ubicada en el corregimiento Santa Rosa, del municipio Bolívar. Con esa planta se llegan a acuerdos para que las comunidades trabajen, porque la comunidad está directamente afectada por donde pasa el oleoducto. Nosotros tenemos unos acuerdos desde años anteriores con esa empresa y Cenit los ha venido incumpliendo. Hay familias a las que les tumbaron la casa hace 20 años y dejaron que se les vencieran los términos y no les respondieron. Esas familias en estos momentos están afectadas psicológicamente”, afirma una de las representantes de la comunidad.
Sin embargo, el día de ayer, mientras la comunidad festejaba el cumpleaños de varios niños y también el Día de las Brujitas, la empresa intentó entrar comida y personal al área de la planta (violando así el paro campesino) y para pasar llevó al Esmad. A pesar de la presencia de niños y adultos mayores en el espacio, el ataque de la fuerza pública fue indiscriminado.
Como resultado de esto, hay un campesino gravemente herido y dos representantes de la comunidad están detenidos en la Estación de Policía de Vélez, sin que hayan tenido atención médica o jurídica. Mientras, Cenit afirma que si la comunidad levanta el paro, ellos retirarán los cargos y las dos personas podrán salir libres.
“Llegaron y nos agredieron para pasar las cosas a las malas. La única manera de que Cenit nos escuche es parándonos en la carretera con un lazo, para no dejarles pasar comida ni trabajadores. Ayer había unos niños cumpliendo años y nosotros habíamos decidido como comunidad celebrarles el cumpleaños y de paso celebrar el Día de las Brujitas, que no se lo habíamos podido celebrar. Le dijimos al Esmad que por favor no le fueran a hacer nada a los niños. Ellos arremetieron de todas formas. Nosotros quitamos a los niños porque evidentemente no podemos tenerlos en una manifestación. Sería muy poco prudente ponerlos como escudos. Los metimos dentro de una casa y el Esmad comenzó a dar bombazos contra la casa donde estaban los niños. Hoy los niños están angustiados y afectados psicológicamente”, afirma la lideresa.
“Capturaron a dos de las personas que trataron de defender a esos niños -continúa-. Porque cuando vimos que estaban agrediendo a la casa donde estaban los niños, la gente se salió. Como somos campesinos, allá todos estaban con su machete y su palito en sinónimo de protesta. Lo que la gente hizo fue pararse y levantar el machete, pidiendo que no agredieran a los niños. Ahí empezaron a tirar las bombas del Esmad contra los cuerpos de la gente. A uno de los muchachos le dio una de las bombas en la cabeza; cuando cayó al suelo, uno de los Esmad le fue encima y le puso el pie en el cuello. En estos momentos, ese muchacho está en coma, en cuidados intensivos”.
¿Qué pide la comunidad?
La comunidad tiene tres exigencias ante Cenit. La primera es que la empresa responda por las viviendas que fueron tumbadas hace más de 20 años para la construcción del caño. Esto fue parte de los acuerdos que se tuvieron en ese momento, para que la comunidad no se viera más afectada por los trabajos extractivos en su territorio. Pero Cenit dejó pasar los términos del contrato sin cumplir su parte.
“Hay incluso una señora que está psiquiáticamente mal, está padeciendo una esquizofrenia desencadenada luego de que le tumbaron su casita porque a ella le tocó irse a vivir a un molino. Nosotros estamos respondiendo por ellos y tratando de que se le responda porque esa gente vive muy mal donde vive”, comenta la representante de la comunidad.
El segundo punto tiene que ver con que la empresa tiene que garantizar que la comunidad se beneficie a través de la contratación de personas que viven en el territorio para trabajar en la planta del corregimiento de Santa Rosa. Esto también fue acordado entre las personas de esa comunidad y Cenit, pero hasta el momento solo han contratado a personas seleccionadas y el resto son personas de afuera quienes van a trabajar allí.
“En la contratación de personal, solamente eligieron a algunos presidentes de veredas del corregimiento, señalados ‘a dedo’. Y eso es ilegal”, afirman las y los campesinos en paro.
Y el último punto tiene que ver con la situación de las vías en el territorio. “Allá es prácticamente imposible acceder dado que la empresa entra camiones grúas, camionetas, etc.. y la vía cada vez está más deteriorada. Necesitamos un arreglo y Cenit no quiere atender a nuestro llamado”, denuncian.
La empresa hace oídos sordos a las válidas exigencias de las y los campesinos del corregimiento La Hermosura. A pesar de que este no es el primer ataque que han sufrido en los 47 días de protesta pacífica, la comunidad afirma que se mantendrá exigiendo sus derechos. Asimismo, aboga por la garantía de los DDHH para sus representantes y pide solidaridad a la Iglesia, la Unión Sindical Obrera -USO- y a organizaciones defensoras de Derechos Humanos.
fuente: https://www.colombiainforma.info/esmad-ataco-protesta-pacifica-campesina-en-la-hermosura-santander/
