Por: Fabio
Arias Giraldo
En la
controversia con el Dane por el censo poblacional, el registrador nacional
Alexander Vega dijo: "Quien considere que no hay garantías, que no
participe"
Prendidas las alarmas, la CUT ha
pedido a los interlocutores de su gira, que serían convenientes misiones de
observación electoral para garantizar la transparencia
La delegación de la CUT Colombia en gira de
incidencia por Europa, en estos días, ha puesto en conocimiento de sectores
gubernamentales, institucionales, políticos y sociales de una serie de hechos
que preocupan en Colombia sobre un probable fraude electoral en las elecciones
de marzo y mayo del próximo año.
La delegación lo ha presentado como una forma de
reiterar un viejo procedimiento en nuestro país de asaltar la democracia y el
querer de muchas decisiones. Se ha puesto de presente el fraude electoral del
19 de abril de 1970 contra la Anapo y su candidato Rojas Pinilla, que terminó
por ungir al candidato frentenacionalista perdedor Misael Pastrana Borrero.
Este grave hecho terminó por alentar la creación del grupo M-19. Las
graves denuncias que ha hecho Rafael García, exfuncionario del extinto DAS,
quien sostiene manipulación del software para asegurar la reelección de Álvaro
Uribe Vélez. Y las últimas denuncias sobre la intervención de la Ñeñepolítica
en la elección del presidente Iván Duque.
El actual gobierno y su partido, en consonancia con
las alertas previstas por el señor del Ubérrimo con su expresión de "ojo
con el 2022" en referencia al proceso eleccionario y una muy previsible
derrota para quienes representan el sector de la extrema derecha en Colombia de
corte neofascista, han venido realizando acciones y medidas encaminadas a
fraguar un probable fraude electoral.
Se han encargado de eliminar violentando la
misma ley, la Ley de Garantías electorales, que prohíbe los contratos
administrativos en período electoral. Con ello liberan billonarios recursos de
la contratación pública para así enmermelar contratistas que permitan finanzas
para la compra de votos.
Se han apropiado de más de $25 billones en caja,
para el mismo propósito, $14,2 billones procedentes de la compra de ISA por
Ecopetrol, la cual ha quedado endeudada y los $10,8 billones de los USD 2.470 millones de
los derechos especiales de giro que el FMI le consignó al Banco de la República
y éste a la caja del Ministerio de Hacienda.
Ha quedado al descubierto las diferencias
significativas entre el censo poblacional reportado por el Dane y la
Registraduría. 50 millones de habitantes reporta el Dane y la
Registraduría 55. Pero además el mismo Dane alerta que hay por lo menos 3,6
millones de colombianos fallecidos que aún hacen parte del censo electoral y
que por tal se convierte en una franja significativa que en antes pudo
modificar los resultados y que hoy se hace más evidente. Estas inconsistencias
generan todo tipo de suspicacias y sospechas.
Y queda el otro tema nunca debidamente despejado o
aclarado por la Registraduría o el Consejo Nacional Electoral, como es la
transparencia del software usado para el conteo de los votos. Es un software
privado que hace parte de la contratación estatal que tantas dudas genera y hoy
mucho más, con este gobierno, contados los escándalos de corrupción como el
abudineado de Mintic o el más reciente de un presunto hackeo en el Mindefensa.
Frente a estos hechos, la delegación de la CUT le
ha pedido a los diversos interlocutores que ha tenido en la gira, que se vería
como muy conveniente misiones de observación electoral antes, en y
después de cada una de las elecciones, para demandar del gobierno y las
instituciones electorales la total garantía de un proceso transparente.
Obviamente hemos advertido sobre el cinismo del registrador nacional Alexander
Vega, en concordancia con lo que hemos alertado, al decir que "quien
considere que no hay garantías, que no participe".
La frágil democracia que aún queda en Colombia está
en serio riesgo. Hoy, al igual que lo hizo con el tema de la paz, la comunidad
internacional puede jugar un papel importante para no permitir un
resquebrajamiento mayor de lo poco que queda de ella.
Se debe señalar, que hubo mucha receptividad y
consideraron los diversos actores con los que se tuvo interlocución, adelantar
las gestiones más
convenientes al respecto.
https://www.las2orillas.co/hay-preocupacion-en-europa-por-un-probable-fraude-electoral-en-colombia/